“…no nos han sacado con el tal amparo policivo,
pero nos quieren matar de sed,
de hambre o con por un derrumbe” (Líder minero)
Cansados de los atropellos cometidos una y otra vez por las empresas contratistas de EPM Ituango, los mineros asentados en las playas conocidas como Icura, decidieron NO permitir la continuidad en la construcción de la vía sustitutiva que conducirá de Medellín a Ituango. Durante la construcción de esta vía en repetidas ocasiones se ha vulnerado el derecho al agua, a un medio ambiente sano y a la seguridad de las personas que como pequeños mineros trabajan en la parte baja de las obras viales.
Mediante actas el consorcio Pescadero I, empresa contratista que construye la obra, se ha comprometido en diferentes ocasiones a proteger las aguas que atraviesan la zona y que son indispensables para la comunidad, además de establecer las medidas necesarias para que los deslizamientos producidos no afecten a las personas que se encuentran en la parte baja, sin embargo esto no se ha cumplido. La obra no sólo ha contaminado, convirtiendo en lodo el agua para consumo humano, sino que ha secado quebradas, y en otras los trabajadores arrojan basuras, orinan y se bañan en las quebradas sin importar que sea esta agua la que abastece a una comunidad.
Al constatar estos hechos y ante los repetido incumplimientos, la comunidad minera decide montar una vigilancia permanente, día y noche cuidando las aguas que necesitan, esta protesta pacífica expresada en el cuidado del agua como bien supremo, se inicio el 6 de noviembre de 2011, en el kilómetro 4 + 900 de la obra en jurisdicción del municipio de Briceño, Antioquia, a pesar del miedo por la agudeza del conflicto en la zona y pese a que el miembros del Ejército Nacional desconociendo la delicada situación de orden público ofrezcan quedarse con los mineros en el lugar de la protesta (en la zona los enfrentamientos entre distintos grupos armados es frecuente); la comunidad minera esta decidida a permanecer en el área hasta tanto EPM directamente, no sus contratistas, den solución a las problemáticas.
Después de algunos días de tan decidida defensa, la estrategia del rumor que intimida y amenaza ha sido la única respuesta, estrategia implementada por la empresa VISE, encargada de la vigilancia del proyecto, los jefes de puestos de seguridad y demás vigilantes, aprovechando el miedo que se siente en la zona corren el rumores como “si no dejan trabajar las maquinas los van a amarrar” “dicen que nos van a sacar, nos van a capturar, a sacar con la policía porque no dejamos trabajar”