Nunca antes a la Procuraduría General de la Nación le había importado la vida y el bienestar de las comunidades afectadas por Hidroituango. Durante años hemos tenido que ver como esta entidad decide deliberadamente favorecer a Empresas Públicas de Medellín (EPM) y atacar a los miembros de nuestra organización y con ello a todas las comunidades afectadas, es evidente la estrecha relación que ha sostenido históricamente la Procuraduría con EPM, de manera particular la oficina de Antioquia. Los funcionarios pernoctan en las instalaciones de la empresa, cada que visitan la zona lo hacen en los vehículos de la empresa, nunca han garantizado nuestros derechos, en las reuniones sobre la situación de emergencia y la evacuación desestimaron las protestas de las comunidades ante el riesgo, de la misma firma que lo hicieron con los desalojos forzosos que ha generado esta empresa, en una ocasión una funcionaria de la Procuraduría dio la orden al ESMAD de atacarnos, los lideres de Ríos Vivos hemos sido discriminados, las actividades de esta entidad siempre han priorizado a líderes que estén a favor a Hidroituango, como si lo anterior fuera poco han tergiversado el cumplimiento de la sentencia que declara el Río Cauca como sujeto de derechos siempre en favor de la empresa. Algunos de los funcionarios de la Procuraduría han asegurado que no existe riesgo en Hidroituango, como si ellos mismos trabajaran para la empresa o el consorcio, olvidando el papel de control e imparcialidad que cumple esta entidad. Todo esto lo hemos tenido que soportar por décadas.
La orden emitida por la Procuraduría General de la Nación a Javier Pava, director de la Unidad Nacional de Gestión de Riesgo de Desastres (UNGRD) constata que la persecución de esta entidad se extiende a toda persona, movimiento y ahora entidad que pregunte, dude, exija o busque la garantía de derechos, en definitiva, La Procuraduría ha estado en a favor del negocio y en contra de las comunidades y ahora en contra del nuevo gobierno que busca protegernos. La solicitud sobre el riesgo de Hidroituango es un absurdo pues la función de la Procuraduría es precisamente que se cumplan las órdenes judiciales y administrativas no estar al servicio de las empresas. La exigencia demuestra que no cumplen su función y deja en evidencia el sesgo descarado de esta entidad para proteger los intereses de EPM.
Las advertencias realizadas por el director de la UNGRD un día después de la activación de las primeras turbinas del megaproyecto sobre los riesgos que esta nueva situación genera para las comunidades tanto aguas abajo como aguas arriba, sus cuestionamientos a la evacuación preventiva realizada el pasado 14 de diciembre dado que no respondió a los requerimientos de la Resolución 1056 del 04 de noviembre de 2022, el llamado a la protección de la vida acudiendo a la aplicación del principio de precaución, provienen de lo que por años han manifestado decenas de estudiosos sobre el tema y lo más importante de la realidad.
El nombramiento de Pava responde a los lineamientos de cambio por la vida de este nuevo gobierno, y su perfil de más de 13 años de trayectoria como ingeniero geólogo en gestión ambiental, gestión de riesgo de desastres, transición energética y cambio climático, lo convierten en la persona indicada para trabajar por la disminución del riesgo como consigna integral de protección. Sus pronunciamientos frente al riesgo generan del macizo rocoso de la obra y las afectaciones que podrían presentarse por la operación de las unidades 1 y 2 y que elevarían el nivel del riesgo tienen un sustento técnico y científico, y sus requerimientos responden al mandato de una gestión del riesgo para la protección de la vida.
Las amenazas sísmicas, entre otras, dan razón a la solicitud de contar con estudios objetivos que permitan determinar la estabilidad o no del megaproyecto, relacionar esta serie de preocupaciones con el “favorecimiento” a intereses políticos es desconocer las preocupaciones que como comunidades que hemos sufrido las afectaciones directas que este proyecto de muerte ha traído consigo, sembrando la zozobra y la incertidumbre, arrebatando nuestros medios de vida y amenazando con el borramiento de nuestra cultura, hemos manifestado, y la falta de argumentos técnicos que den certeza de la ausencia del riesgo. Pero sobre todo es desconocer que hay pronunciamientos en este mismo sentido por parte de un Juez de la República que hasta ahora no se han cumplido.
Es por esto que rechazamos la persecución de la Procuraduría General de la Nación al director de la UNGRD, Javier Pava, a la par de las afirmaciones y comentarios malintencionados del alcalde de Medellín, Daniel Quintero, quien en recientes declaraciones ha instado al presidente Gustavo Petro a solicitar la renuncia de Pava buscando tener injerencia política y que salga del gobierno todo aquel que no piense como él o que cumpla con su función. Ya hemos sido testigos de cómo sus declaraciones irresponsables son acomodadas a su amaño e influencian en decisiones que perjudican a quienes nos oponemos a su política reduccionista que antepone sus intereses económicos a la Vida y a los derechos de las comunidades.
El Movimiento Ríos Vivos Colombia agradece al Director Javier Pava y a la Unidad Nacional de Gestión de Riesgo de Desastres porque por primera vez en su historia esta entidad está realizado su función, al escucharnos como comunidades en espacios como el Puesto de Mando Unificado Abierto sobre Hidroituango realizado en Puerto Valdivia el día 05 de noviembre de 2022, al acudir al principio de prevención a través de la Resolución 1056 del 04 de noviembre de 2022 para disminuir el riesgo de pérdida de miles de vidas en el marco de la puesta en operación de las primeras turbinas de Hidroituango, y exigiendo garantías para la evacuación preventiva en condiciones dignas. Así mismo le recordamos a la Procuraduría, y al señor Daniel Quintero que nuestras exigencias y denuncias, el miedo, la incertidumbre y la zozobra que sentimos a diario, tienen sustento en nuestro conocimiento ancestral del territorio, y ha sido confirmado por la realidad innegable y por los múltiples estudios de expertos técnicos y científicos que han advertido lo que pasó, lo que está pasando y lo que podría pasar.